“Peregrinos del Amor” fue la charla que dio Luis Marino Restrepo, colombiano. Compartió con la comunidad de la parroquia su pérdida de fe alejamiento de Dios y de la iglesia Católica por más de 20 años; y cómo el secuestro que sufrió por parte de la FARC, en condiciones de absoluta vulnerabilidad, le permitió experimentar un encuentro con Dios que lo ha llevado por el mundo a compartir su testimonio de fe y conversión
“Viví y estudie en Alemania y posteriormente me radiqué en Los Ángeles, Estados Unidos. La única persona que me habló de Dios y que estuvo preocupada de mi alma fue mi madre; porque ella veía como yo estaba centrado en lo material”. Sin embargo, en una visita que realizó a su familia a Colombia en 1997 cambió su vida para siembre. Fue secuestrado por guerrilleros de la FARC el 25 de diciembre, quienes lo condujeron por la selva por varios kilómetros, con los ojos vendados y sus manos amarradas, hasta llegar a una cueva donde estuvo por seis meses.
Fue amenazado de muerte él y su familia sino pagaban por su rescate, en esas circunstancias de vulnerabilidad absoluta tuvo una experiencia con Dios. “Pude entender la importancia de los sacramentos. La confesión que permite mantener nuestra amistad con Dios, porque es en la reconciliación con Él cuando experimentamos la liberación de todas las ataduras del pecado”. Restrepo hizo hincapié que fue Dios quien lo rescató de la selva “Él tenía un plan conmigo, y lo primero que hice fue confesarme en un Monasterio Franciscano, desde ahí he visitados cientos de países para contarles esta experiencia. Porque para Dios no hay nada imposible ”, concluyó Restrepo.
